Por #RodrigoRamírez
Lic. En Derecho #InstitutoInter
Colaborador de #RevistaDivergencia
La #agricultura es, desde luego, una de las actividades más antiguas que el hombre desarrolló para su #supervivencia, puesto que al ser un ente nómada y terminar con sus fuentes proveedoras de alimentos cercanas, se vió en la necesidad de emigrar y asentarse en zonas cuyas condiciones eran amplias en vegetación, pues buscaban establecerse cerca de mantos acuíferos como lagos, ríos y mares. Por tal situación, pasó de ser nómada a convertirse en sedentario; desarrollando surcos de #siembra con utensilios y herramientas que, con el tiempo, pasaron de ser palos y piedras a herramientas de metal, así como #técnicas para que los #alimentos no escasearan a pesar de habitar en una zona determinada.
Como se sabe, México es un país con amplia trascendencia #agrícola, pues al igual que los Egipcios y Babilonios -con sus famosos jardines flotantes- los antiguos pobladores del lago de Texcoco desarrollaron #chinampas que funcionaron como pequeñas islas artificiales de cultivo, mismas que hoy por hoy conocemos como #método hidropónico de #siembra.
Sin embargo, con la #urbanización de las ciudades y la modernización del país, han ocasionado que poco a poco las #tierras que alguna vez fungieron para el cultivo de alimentos, hoy sean para usos habitacionales o, peor aún, abandonadas, ocasionando que con el tiempo perdamos esa #riqueza cultural y agrícola que distingue a México.
Tengamos #conciencia por recuperar e impulsar la #agricultura orgánica del país dejando de consumir alimentos que contienen químicos dañinos para nuestra #salud, que provienen de otras naciones y que son, en exceso, caros. Descubramos que no se requieren amplias hectáreas de tierra para #cultivar nuestro alimento, sino únicamente decisiones de un cambio.
La #agricultura orgánica es uno de los pilares del futuro, trabajemos por impulsarlo y #luchemos por recuperar esa #identidad agrícola.
《sembremos paciencia y cosechemos el futuro de la agricultura orgánica》. -RODRIGO RAMÍREZ.
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