Por: #RicardoLides
Lic. En Sociología en #UAM-Xochimilco
Director Editorial de #RevistaDivergencia
Necesario es revivir las circunstancias, al parecer indestructibles, de la acción colectiva, pues es y será la razón para animar la reivindicación popular. Circunstancias meramente de tortura, atosigo, represión y de explotación intolerable, son sólo algunas de las causas para tener el fervor y valor para poder afrontarlas.
Los caminos que llevan a la historia son medios a través de los cuales la misma historia se realiza. Por tal razón, es importante tener en cuanta, hoy en día, la razón de ser de un #movimientosocial, de una #rebelión o de un levantamiento.
Es fundamental puntualizar que ningún movimiento social de la #actualidad debe estar sujeto a ningún partido político, de lo contrario fracasaría o quedaría como un movimiento coyuntural.
La crítica obsoleta de los medios de comunicación #masiva hacía los movimientos y su vinculación con el poder, hacen tener a la mayoría de las personas una visión mínima del porqué de las diferentes formas de protesta y de lucha que se llevan a cabo.
Sin lugar a dudas, la difusión y la propaganda es un medio para poder generar ideas, pues se tiene la necesidad de una #crítica y autocrítica para no sólo generar opiniones sin fundamento.
La propaganda, #históricamente, se concibe como un mecanismo de comunicación para la persuasión, desde una realización editorial, hasta un fanzine; desde la organización de un círculo de estudio, hasta la realización de una pinta. Ésta última, ha sido una forma de protesta legitima adoptada por varios movimientos, pero es ilegal y vandalizada por la propiedad privada coludida con el poder y los medios de comunicación.
Es tener muy poco sentido del #humor para venerar a la propiedad privada, y callar las voces que, literalmente han sido transcritas a la pared. Es transgredir el orden establecido para denunciar y exponer situaciones alarmantes.
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