Lic. Biología y estudiante de Derecho, #UNAM
Colaboradora de #RevistaDivergencia
https://karendelatorre.com/
El 15 de septiembre es una fecha para conmemorar el aniversario del inicio de la lucha por la libertad de #México. En condiciones normales, se trata de una verbena popular en la que millones de familias se reúnen en la plaza principal de su ayuntamiento a las 23:00 horas para llevar a cabo el #Grito de Independencia, seguido por una grandiosa fiesta con grupos musicales, ferias, pirotecnia, baile y comida.
Sin embargo, a raíz de la #contingencia sanitaria, provocada por el virus SARS-CoV2 (COVID-19), estamos orillados a evitar cualquier tipo de festejo que implique la aglomeración de personas, a idear alternativas diferentes y creativas para realizar nuestras celebraciones en el marco de la nueva normalidad, siempre pensando tanto en nuestro bienestar como en el de todos los miembros de la familia.
En ese sentido, y debido a que las #mascotas también son integrantes de nuestras familias, resulta obligado estar consientes y reflexionar acerca de las situaciones a las que exponemos a los animales cuando decidimos usar fuegos artificiales.
El ruido ocasionado por cualquier tipo de #pirotecnia tiene. Comúnmente se presenta deambulación, temblor, encogimiento, inapetencia, deseo intenso de ingerir agua y estar en contacto permanente con el dueño. Otras reacciones más graves implican palpitaciones, jadeos fuertes y prolongados, taquicardia, temblores, salivación intensa, sensación de insuficiencia respiratoria, falta de aire, aturdimiento, náuseas, pérdida del control, incluso, la retención de heces u orina.
En casos más serios, sobre todo con animales callejeros, el estado de pánico al que se someten provoca el instinto descontrolado de escapar; algunos corren frenéticamente, arañan o muerden las paredes, otros, saltan a sitios peligrosos provocándose heridas graves, o bien, se pierden y son atropellados, agonizando lejos de su hogar.
Decidir no usar fuegos artificiales en tus #festejos patrios, por tomar en cuenta el bienestar animal, significa poner un excelente ejemplo a las generaciones futuras; además, es una forma maravillosa de apegarse a la «Declaración Universal de los Derechos del Animal» promulgada por la UNESCO el 15 de Octubre de 1978, ya que en el preámbulo establece que «la educación debe enseñar, desde la infancia, a observar, comprender, respetar y amar a los animales».
No existe razón que justifique provocar el sufrimiento de un ser vivo, mejor conservar el espíritu festivo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario